Agujas, tinta y un poco de historia el Museo del tatuaje
El tatuaje siempre ha sido un tema de tabú en México. Aunque la tendencia de “moda” ha ido en aumento reciente, la tinta todavía se ve con toda clase de prejuicios para quien se tatúa. Como consecuencia de esto, un estudio convertido en pequeño museo, es la propuesta, única en el país, que trae Tony “El Chacal” Serrano. Desde su apertura en 2014, nace con la visión de acercarnos a la historia y técnicas de Agujas, tinta y un poco de historia en el Museo del tatuaje, ¿lo conocemos?
Las instalaciones del museo quedan sobre Insurgentes Sur 221, en un edificio viejo de tres pisos. Como ya mencionaba, este lugar fue por años el estudio de El Chacal, hasta que se decidió a abrir al público su colección de objetos.
La exhibición es algo impresionante, aunque también reducida a la capacidad a espacio y algo desorganizada (pero han mejorado desde la remodelación a inicios del año). En la planta baja se observan fotografías que remontan al tatuaje tradicional de culturas tan diversas como la polinesia o la makonde, obra del antropólogo Lars Krutak.
Pero lo más interesante es mirar la evolución de los instrumentos para tatuar, dónde te encuentras con las agujas con las que se trabajaba antiguamente en Japón y Filipinas, que contrastan mucho contra los aparatos usados en la cárcel que también se muestran.
Ya en el segundo piso, el museo tiene tintes de galería: en las paredes hay decenas de cuadros con stencils grabados con diseños de diferentes épocas, donde no faltan las calaveras y los símbolos religiosos a todo color.
Particularmente destacan partes como la de «Raíces mexicanas», que trata sobre el encanto del estilo chicano como expresión mutua de lo mexicano y lo gringo. Aquí es necesario entrar quitándose las ideas de la cabeza y realmente ver el valor cultural del tatuaje por lo que representa.
Si bien aquí acaba el recorrido, no termina lo que puede hacerse en el museo subiendo al último piso. Por una parte, hay un par de salas donde hay seminarios impartidos por expertos de las técnicas ingeniosas para tatuar, mas las muestras de su trabajo.
Si ya tienes presupuesto y muchas ganas de decorarte la piel, en este espacio hay más de seis artistas de planta que trabajan toda variedad de estilos, desde lo grotesco, a tinta negra y caligrafías complicadas hasta lo minimalista y a todo color. Todo esto con la calidad y limpieza que presume y se merece un rincón que aprecia tanto este arte. Para conocer más del equipo de trabajo y hacer cotizaciones, está la página de Facebook del museo (https://m.facebook.com/Museo.tatuajes.mexico/).
Para que los curiosos conozcan más a fondo las exhibiciones, hay visitas guiadas de un personal amable y gustoso de compartir la pasión. Tan sólo hay que ponerse en contacto por medio de la misma página. El museo del tatuaje aún promete mucho potencial para el futuro, en el que Tony busca ampliar y seguir mejorando la recolección de la historia tatuadora para que el pueblo mexicano conozca un poquito más sobre ella.
El museo del tatuaje abre de martes a domingo en un horario de 10 am a 8 pm. Ahora que ya lo conoces, ¿te animas a conocerlo?.
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