Si te gustan las cantinas clásicas, seguro ya conoces LA POLAR, si aún no, descubre estos detalles que te tengo
Éste domingo tocó curar la cruda en una de las cantinas clásicas: La Polar; esta cantina, que lleva funcionando desde 1934, y que se encuentra en el corazón de la ciudad.
Es famosa por el único platillo de su menú: la birria. Así es, el único plato fuerte que puedes pedir es birria, eso sí es tan buena, que con lo único que la necesitas acompañar es una cerveza muy fría y alguien con quien intercambiar anécdotas de la noche anterior.
Aunque, si se te antoja más, también la puede combinar con las tortillas, limón y salsa con las que viene; con una orden de aguacate y queso fresco, o incluso comerla en consomé. Para cerrar con broche de oro, ordena uno de los deliciosos postres de su charola; te recomendamos el clásico flan, la tarta de higo o el pastel de tres leches.
Nosotros llegamos a las 3 pm, con un dolor de cabeza para morirse y un hambre para matar; nos pudieron dar mesa enseguida aunque el lugar estuviera a reventar ya que es inmenso.
Lo primero que notamos fue el aumento de la jaqueca a causa del excesivo ruido de la gente y la estrepitosa banda, pero después de fondearnos unos vasos de agua con aspirinas la cosa mejoró. Ordenamos, para 5 personas, medio kilo de birria con todos los acompañamientos, una ronda de cervezas y los postres, con lo que quedamos más que satisfechos. La mala sorpresa fue para la quinta persona que no le gustaba la birria así que se tuvo que conformar con unos tacos de aguacate, queso y claro su pastel de tres leches (es un restaurante no apto para vegetarianos… ni para cualquier persona que no le gusta la birria). Más satisfechos aún quedamos cuando nos trajeron la cuenta y no tuvimos que quedarnos con la cartera vacía.
Después de esta experiencia te recomiendo ir a la polar en plan de post after para seguir la fiesta en alguno de sus múltiples salones (o por lo menos no llegar con una cruda marca diablo); echarte algunos tragos de su amplia carta y poner una canción bailable en la rockola o también puedes pedírsela a la a la banda para cantar ahogando penas y celebrando con amistades.
Si vas a hacer ésto te recomendamos ir antes de la hora de la comida (abre a las 7:30 am) y llevar un poco más de dinero porque el ambiente se vuelve familiar y los tequilas suben mucho la cuenta.
Si tienes un plan más tranquilo como el nuestro (insistimos, NO vayas con dolor de cabeza), con $200 por persona te alcanza perfecto para una buena tragadera.
Afuera de la polar hay un letrero en el que se lee: «Bebidas sólo con alimentos» que aunque es razón de queja para muchos, especialmente los que en vez de bajarse quieren subir la borrachera, en cuanto dan el primero bocado lo agradecen, ya que, en nuestra no tan experimentada opinión, el esolgan no miente cuando dice que es «La mejor birria de México».
Si aún no sabes en dónde esta la Polar te platico que ese encuentra en el número 129 de la calle Guillermo Prieto, en la colonia San Rafael.
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